Sansón
La confianza
se forma por el carácter y la credibilidad.
Lecturas bíblicas Jueces 13:1 al 16:31
¿Cómo
alguien que tuvo una salida tan enérgica en la vida pudo terminar en tan mala
forma? Desde todos los ángulos, Sansón pudo haber sido uno de los más grandes hombres
de Israel, sin embargo, cuando todo fue dicho y hecho, resultó ser uno de los
peores.
Salida enérgica—llegada débil
Sansón lo
tenía todo. Era un niño especial, anunciado por el ángel de Jehová a sus
padres. Tenía un destino y propósito divino. La Biblia narra que el ángel dijo:
«El niño será nazareo a Dios desde su nacimiento, y él comenzará a salvar a
Israel de mano de los filisteos» (Jueces 13.5). Y aun desde niño, Sansón fue
bendecido por Dios, y el Espíritu de Dios estaba sobre él (Jueces 13.24–25).
Sansón realizó hazañas de fuerza durante su vida, y
juzgó a Israel durante veinte años. Sin embargo, a pesar de su buena salida,
Sansón se metió en problemas muchas veces, y finalmente acabó en mala forma:
terminó débil, ciego, y esclavizado por los filisteos de quienes, se suponía,
debió librar a su pueblo.
Su despreciable carácter lo hizo indigno de confianza.
Era impetuoso, voluble, lascivo, caprichoso, sentimental e imprevisible. Nadie
podía descifrar sus intenciones, ni siquiera su nueva esposa, su suegro, ni los
israelitas. Su gente lo ató y lo entregó a los filisteos para salvarse ellos
mismos.
La falta de confianza en Sansón se extendió a Dios.
Antes de estar acabado, rompió su voto de nazareo. Primero, antes del
matrimonio, tocó un animal muerto (Jueces 14.9). Segundo, celebró una fiesta de
bodas con mucha bebida alcohólica (Jueces 14.10). Y cuando finalmente rompió el
tercer voto, al permitir que le cortaran el cabello, Dios quitó la unción de su
vida (Jueces 16.19–20). Sansón coqueteó reiteradamente con el desastre, hasta
que lo atrapó.
Las señales cuando el terreno no está firme
“El que
camina en integridad anda confiado;
Mas el que
pervierte sus caminos será quebrantado.”
Proverbios 10.9
Sansón tuvo
tiempo para cambiar, pero no lo hizo. Jueces 14–15 bosqueja gran parte de su
impetuosa conducta y el fruto de su mal carácter, sin embargo, el pasaje
termina diciendo de Sansón: «Juzgó a Israel en los días de los filisteos veinte
años» (Jueces 15.20).
Observe la
vida de Sansón y verá un patrón negativo de conducta que indicaba problemas, en
términos de su relación con Dios y su liderazgo ante el pueblo. Nadie se sale
de los límites sin pasar primero las señales que indican que anda en terreno
peligroso.
Cuando los
líderes comienzan a erosionar el terreno sólido de un liderazgo digno de
confianza, normalmente exhiben una o más de las siguientes señales de que se
están metiendo en problemas. Al igual que Sansón, los líderes en problemas:
1. No prestan atención a debilidades evidentes en su carácter
Desde el principio de su vida, Sansón tuvo problemas
con la impureza sexual. Y debido a que no trató de refrenar su deseo, se salió
continuamente de sus límites. En vez de honrar el mandamiento de Dios de no
casarse con una mujer que no fuera hebrea, pidió a sus padres una esposa
filistea, porque, como dijo, «ella me agrada» (Jueces 14.3). Después se acostó
con prostitutas. La destrucción final vino como resultado de su relación con
Dalila.
Cuando usted no se cuida de reparar las manchas en su
carácter, estas empeoran. Las fallas lo llevan sin remedio en una espiral
descendente que culmina en la destrucción del fundamento moral.
2. Se apoyan en el engaño para salvaguardarse
Cuando una persona coquetea con la desobediencia, a
menudo se sorprende usando el engaño para defenderse. Esto le ocurrió a Sansón.
Era aficionado a las adivinanzas para engañar a los demás. Cuando traspasó
completamente la línea de la obediencia para tener sus amoríos con Dalila,
mintió repetidas veces. Para protegerse, le mintió tres veces sobre la fuente
de su fuerza. Cuando la persona tuerce la verdad en cualquier forma, da una
señal segura de que está en problemas.
3. Actúan impulsivamente
Una y otra vez Sansón mostró su impetuosidad. Eligió a
su esposa apresuradamente. No consideró las posibles consecuencias al plantear
una adivinanza a los asistentes a la boda o al revelar la respuesta a su esposa
filistea. En más de una ocasión se encontró en una batalla sangrienta como
resultado de su espíritu impulsivo. La persona que no puede controlar su
temperamento se pone en peligro él y a los que están a su lado.
4. Manejan mal los dones de dios
Sansón poseía una fuerza increíble y la unción divina,
pero dio por sentado ambos dones. De hecho, a veces usó su influencia para
jugar a fin de entretenerse. Después que el suegro le entregó su esposa al
padrino de boda, Sansón abusó de lo que Dios le había dado para liberar a su
pueblo, usándolo como venganza personal. Eso provocó la muerte del suegro de
Sansón y de la hija del filisteo.
5. Caen debido a algún punto de debilidad
Los que dan rienda suelta a sus pecados a la larga se
ven consumidos por ellos. Cuando Sansón conoció a Dalila, finalmente encontró
la horma de su zapato. El engañador fue engañado; el seductor, seducido. Jugó
con ella, sabiendo que trabajaba para el enemigo. Pero ella se aprovechó de él,
y lo sedujo para que le dijera todo lo que tenía en su corazón (Jueces 16.18).
Era un juego peligroso, que Sansón perdió y le costó todo.
A algunas
personas les gusta creer que sus imperfecciones privadas no van a tener
consecuencias públicas, pero siempre las tienen, lo que hacen en las tinieblas
saldrá a la luz. Si lo que hacen es bueno, eso edifica el carácter y la confianza de la gente en él.
Si es malo, entonces mina todo lo que hace hasta que
no queda terreno sólido donde pararse.
Pregunta de
reflexión para hoy:
¿Puede
detectar en su vida algunas de estas señales de problema?
ALGO PARA HACER
Haga una
lista de aquellas cosas que usted considera que están evidenciando erosión en
su Carácter:
Por Jhon Maxwell